La accesibilidad para todos es algo por lo que apostamos en Promissan. Con la celebración del Día Mundial del Turismo se pone de manifiesto una necesidad común: la accesibilidad. Nuestras ciudades, espacios públicos y, por supuesto, nuestros edificios y viviendas, deben ser lo más accesible posibles. Es una necesidad universal, como bien apunta el lema que desde la Organización Mundial del Turismo promueven este año: ‘Turismo para todos. Promover la accesibilidad universal’.
Siempre que viajamos nos gusta encontrarnos que los espacios son respetuosos con todas las personas y en especial con las que poseen alguna discapacidad. Por eso, debemos invertir en cada paso que damos y que desde nuestro pequeño espacio podamos colaborar.
Nuestros edificios y comunidades de vecinos deben ser el primer paso. Las rampas y ascensores ayuda a aquellas personas con movilidad reducida. El sistema de escritura Braille está imponiendo cada vez más en los letreros y numeración de los ascensores. Y cada vez es más habitual escuchar cómo una voz o una dulce música nos indica cuándo hemos llegado al piso indicado, o cuándo podemos cruzar la calle.
Trabajemos juntos por la accesibilidad para todos, no como un lujo, sino como algo imprescindible en nuestro día a día.
A lo largo de más de 20 años de trabajo en el sector de la construcción en Promissan hemos apostado por la accesibilidad. Nuestras obras más representativas son las que incluyen eliminación de barreras arquitectónicas e instalación de ascensores.
